El ritmo personal diario está coordinado con la luz del día y de la noche. Gracias a esta coordinación tenemos una salud más fuerte, es por ello que el sector de la iluminación está creando productos que dan respuesta a esta necesidad a través de la luz artificial individual para los trabajadores.
Es el caso de la lámpara de sobremesa de la marca Luctra, que da una respuesta eficaz para el mundo laboral.
Esta luz consigue diferentes retos:
Permite ajustar la intensidad al momento del día, para activar más intensidad en los momentos más activos y relajar la intensidad previo a las comidas o al momento de plegar; ayudando al rendimiento de los usuarios.
Y también permite ajustar el espectro del color y que se asemeje al de la luz solar; detalle que estabiliza nuestro reloj interno, según el estudio clínico elaborado por el investigador del sueño, Dieter Kunz. Este ajuste mejora enormemente nuestro bienestar laboral.
En nuestros entornos laborales hay que ir introduciendo estos productos que mejoran la vida de las personas, ¡son pequeños cambios que ayudan las empresas en el objetivo de la mejora continua y de la salud laboral!
Olga Guday
Arquitecta